Día de Todos Los Santos

En un colegio católico no se puede celebrar el día del niño el día 31 de octubre, el día de Halloween. Primero, Halloween no tiene nada de colombiano y menos de católico. Por el contrario Halloween es americano, celebra la brujería, el mal, el miedo, la magia, la muerte en fin al demonio y a sus pompas.

Los católicos, en cambio, celebramos el primero de noviembre la fiesta de Todos los Santos. Una fiesta muy antigua en la Iglesia y una fiesta demasiado alegre y llena de esperanza. En este día, el cielo y la tierra se alegren de todos los que después de una vida de bien, de sufrimiento muchas veces, de varias pruebas y de amor a Dios han logrado la santidad que es la perfección del amor a Dios y al prójimo. La santidad es el fin de nuestra vida y la condición para alcanzar el cielo, la vida eterna con Dios.

En este día, los niños de nuestro colegio se disfrazaron de ángeles y de santos. El día empezó con la Santa Misa acompañada de muchos papitos y luego los niños se presentaron y compartieron unas onces muy especiales. Después de una película nos fuimos a la Capilla de San Vicente Ferrer donde el Padre Luis conto a los niños sobre la vida del santo dominico y nos regresamos al Parque Principal a la una de la tarde donde los papitos estaban esperando a sus hijitos para tenerlos en la casa por la tarde.

Damos gracias a Dios por el don que es para nosotros los santos. Ellos nos ayudan a ir al cielo y son ejemplos de vida para cada uno de nosotros.